El años pasado ya pudimos disfrutar de la primera edición de la Vintorobike. Este año no queríamos perdernos la ruta. Al rededor de 400 ciclistas nos dimos cita en la ciudad de Toro. Al igual que la edición anterior había dos rutas para elegir: ruta coarta de 40 km y ruta larga de 60 km. Mi opción fue la ruta corta. Ya sabia que iba a ser una jornada dura así que después de haber salido un solo día por caminos en este trimestre y con bastante sufrimiento ya sabia yo que fácil no lo iba a tener.
El tiempo nos acompaño muchísimo y la lluvia nos respetó. Frio no hacia demasiado, o es que yo no lo tenia. Con las subidas que había no había sitio para pasar frio.
Tramos se subidas duras, empinadas, de las de poner pie a tierra pero salvables. Bajadas bastante técnicas, pero ahí está cada uno.
La ruta corta estaba muy bien marcada, la larga hubo tramos en los que no, de hecho se perdió gente. Avituallamientos muy completos.
Tuvieron que cambiar en el ultimo momento el tramo final del rio porque debía de estar crecido y era peligroso, a cambio nos hicieron subir por una larga y tendida cuesta de asfalto.
La verdad es que yo estaba temblando porque me veía al final de la subida, bajando de nuevo para volver a subir por la cuesta empedrada y con curvas del año pasado, pero afortunadamente no fue así.
Sufrí, mucho, la verdad. Tuve ratos que me tenia que ir dando masajes porque tenia tirones y calambres en las piernas. Pero la disfruté muchísimo. Ha habido bajadas divertidísimas y zonas con un paisaje espectacular.
Fotos de Miguel Ángel Lorenzo Temprano
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